Arroz con leche | n a t i n a t i l l a s

Hola a todooooos después de tanto tiempo sin dejarme caer por aquí… es que el verano es lo que tiene! en vez de meterse en la cocina a hornear, apetece más disfrutar del sol, esto es así!

Pero bueno, vengo con una receta tremendamente buena y muy fácil, arroz con leche, receta tradicional donde las haya!

¡¡Así que vamos con ella!!

Ingredientes

250 gr. arroz

185 gr. azúcar

1750 ml. leche (es una medida aproximada, depende de los gustos y también del arroz, ya que seguramente existan arroces que absorban mayor cantidad de leche que otros y también hay quienes prefieren el arroz con leche más o menos caldoso)

Piel de un limón

1 ramita de canela

Elaboración

1. Lo primero que haremos será poner a fuego medio-alto aproximadamente 500 ml. de leche, la piel del limón (intentando coger solamente la parte amarilla de la piel), y la ramita de canela en una cazuela/sartén amplia lo más antiadherente posible.

Es súper importante que en ningún momento dejéis de remover, porque la leche se pega con muchísima facilidad…

2. Una vez que la leche esté caliente, añadimos el arroz.

3. Removemos el arroz para que la leche cubra perfectamente el arroz y dejamos que el arroz comience a absorber toda la leche.

4. Cuando comience a hervir ligeramente, añadimos otros 500 ml. de leche. y realizamos el mismo proceso.

5. Una vez que el arroz haya absorbido prácticamente el litro de leche, añadimos otros 500 ml. y realizamos de nuevo el mismo proceso.

6. Añadimos los 250 ml. de leche que nos quedaba y realizamos la misma operación. Eso si, tenéis que ver que el arroz ya no esté duro, si después de haber echado 1750 ml. de leche no está blando, tendréis que seguir echando leche y realizar la misma operación tantas veces como sea necesario.

7. Por último añadimos el azúcar y mezclamos perfectamente hasta que quede integrado.

8. Una vez que hemos echado el azúcar tenéis que conseguir la textura que más os guste. Cuanto más caldoso os guste, menos tiempo tendréis que tenerlo en el fuego.

Et voilá!